Mateo
5:16 Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean
vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los
cielos.
Tenemos a Dios en cualquier lugar, en cualquier situación, en cualquier momento pero muchas veces decimos con cara de circunstancia que El no nos habla, que no recibimos mensaje de su parte y te digo que El si que habla a todos y cada uno de sus hijos.
Recuerdo los principios de mi vida cristiana como un tiempo en que todo lo quería saber, todo quería conocerlo y una de las costumbres que adopté fué la de llevar una Palabra de Dios, una Biblia, cada vez que asistía a una reunión en la congregación, o a un curso, o a los cultos.
Realmente
no hacia mal en llevarla, me servia de mucho aunque con el tiempo y la ayuda del Espíritu aprendí a usarla correctamente y no tan solo limitarme a tomar en ella alguna que otra nota y remarcar los versículos que mas me atraían o, mejor dicho, me instruían.
Aún reconociendo soy un desastre para memorizar versículos pues es una de las cosas que más me cuesta, se aprende con el tiempo que no solo es memorizar, se aprende con el tiempo que se debe meditar también para hacer nuestra la enseñanza o instrucción que El tiene en este u aquel versículo, se aprende con el tiempo a ser fieles confesando al Señor los pecados que nos muestra y están en nuestra vida presentes, se aprende que debemos agradecer siempre los dones que nos da y que nos muestra su Palabra.
Gloria a Dios aprendí que debía encontrar una igualdad relativa en cuanto a estudiar su Palabra y meditarla para recibir el nutriente espiritual que se nos ofrece.
No es tan solo memorizar pues debemos también digerir y asimilar, que lo leído pase a formar parte de nuestro ser.
Este hermoso recurso que nos da, su Palabra, producirá significativos cambios en nosotros para que seamos públicos anuncios de toda su inmensa e inmerecida Gracia, seamos reflejo del poder restaurador de la Cruz, seamos en definitiva una pequeña luz que muestra el camino a la puerta estrecha, seamos aquell@s que sabemos mostrar el camino a otros desde este oscuro mundo hacia una eternidad con luz y vida eterna. Y siempre toda honra y gloria a Dios.
Vuestro hermano en Cristo Soldado de Dios.
DIOS OS BENDIGA EN EL PODEROSO NOMBRE DEL SEÑOR. ATT. DEVOCIONALES CRISTIANOS MANÁ.
http://www.devocionalescristianosmana.org.es/
Tenemos a Dios en cualquier lugar, en cualquier situación, en cualquier momento pero muchas veces decimos con cara de circunstancia que El no nos habla, que no recibimos mensaje de su parte y te digo que El si que habla a todos y cada uno de sus hijos.
Recuerdo los principios de mi vida cristiana como un tiempo en que todo lo quería saber, todo quería conocerlo y una de las costumbres que adopté fué la de llevar una Palabra de Dios, una Biblia, cada vez que asistía a una reunión en la congregación, o a un curso, o a los cultos.
Realmente
no hacia mal en llevarla, me servia de mucho aunque con el tiempo y la ayuda del Espíritu aprendí a usarla correctamente y no tan solo limitarme a tomar en ella alguna que otra nota y remarcar los versículos que mas me atraían o, mejor dicho, me instruían.
Aún reconociendo soy un desastre para memorizar versículos pues es una de las cosas que más me cuesta, se aprende con el tiempo que no solo es memorizar, se aprende con el tiempo que se debe meditar también para hacer nuestra la enseñanza o instrucción que El tiene en este u aquel versículo, se aprende con el tiempo a ser fieles confesando al Señor los pecados que nos muestra y están en nuestra vida presentes, se aprende que debemos agradecer siempre los dones que nos da y que nos muestra su Palabra.
Gloria a Dios aprendí que debía encontrar una igualdad relativa en cuanto a estudiar su Palabra y meditarla para recibir el nutriente espiritual que se nos ofrece.
No es tan solo memorizar pues debemos también digerir y asimilar, que lo leído pase a formar parte de nuestro ser.
Este hermoso recurso que nos da, su Palabra, producirá significativos cambios en nosotros para que seamos públicos anuncios de toda su inmensa e inmerecida Gracia, seamos reflejo del poder restaurador de la Cruz, seamos en definitiva una pequeña luz que muestra el camino a la puerta estrecha, seamos aquell@s que sabemos mostrar el camino a otros desde este oscuro mundo hacia una eternidad con luz y vida eterna. Y siempre toda honra y gloria a Dios.
Vuestro hermano en Cristo Soldado de Dios.
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