Efe 4:8 Por lo cual dice: Subiendo a lo alto, llevó cautiva la cautividad, Y dio dones a los hombres
Herman@s, Cristo descendió hasta las profundidades de la tierra, predicando a los espíritus que estaban cautivos, presos, y dice la Palabra que cuando ascendió se llevo cautiva la cautividad, bendito sea, pero no era suficiente, mas quiso dar al hombre, al creyente, y Dios derramo la Gracia, generosidad del Padre y dio dones a los hombres. Aquí es cuando para muchos comienzan los problemas, ya que se ha repartido conforme a la medida de fe que Dios nos ha dado y no para enseñorearse unos a otros. Vemos hoy en día
en muchas congregaciones donde parece que haya una lucha para ver quien tiene mas dones, despreciando a aquel herman@ que se considera que no tiene don, no se trata que quien tenga mas dones es mejor que otro ante los ojos del Señor, noooooooo. Cuanto error, porque todos tenemos algún don, pero no para use y disfrute de una congregación ambiciosa, no para uso personal, sino para desarrollarlo en aquello que Dios requiera de nosotros. El Espíritu nos guiara, nos enseñara usarlos en la medida necesaria y siempre para la honra y la gloria de Dios.
Mientras unos cuantos se pelean mostrando soberbia ante los cuales, como un pavo real desplegando sus plumas, se va olvidando el verdadero sentido de los dones. Herman@s es un regalo, un regalo que el Padre le ha gustado darnos, un don como os diría personificado, podemos ver dones parecidos pero son distintos, porque todos nosotros también somos diferentes, y si sabemos que somos parte del cuerpo de Cristo, no todos somos una misma parte, sino que cada uno tiene su función, pues así mismo los dones que fueron repartidos a los hombres. Aunque algunos jueguen con fuego haciendo malabares con sus dones, debemos ser conscientes de la responsabilidad que tenemos frente a ello, ya que con ese don somos de bendición para muchos, seremos de edificación, sea con una palabra, sea con un gesto, sea con nuestro testimonio, por ello digo de la responsabilidad que tenemos y debemos alejarnos de aquellos que hacen comercio del regalo de Dios.
Responsables herman@s porque la Escritura nos dice en Rom 11 que irrevocables son los dones y el llamamiento de Dios, así que herman@s no tomemos por poco lo que el Señor nos ha regalado, ni juguemos con ellos, ni hagamos comercio de ellos, ya que son para su honra y su gloria.
Vuestra hermana en Cristo Maika.
DIOS OS BENDIGA EN EL PODEROSO NOMBRE DEL SEÑOR. ATT. DEVOCIONALES CRISTIANOS MANÁ.
http://www.devocionalescristianosmana.org.es/
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