¿LE CONOCEMOS...?

1 JN 2:4 El que dice: Yo le conozco, y no guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso, y la verdad no está en él

Cuando reflexiono en lo que esta ocurriendo hoy por hoy en el mundo, en las congregaciones e incluso el acoso y derribo que estamos teniendo en este ministerio, me llego a preguntar ¿conozco a Dios, realmente? ¿Que es el amor? Y algo tan importante como ¿sabemos amar?, si nos preguntáramos todos esto mismo cada uno de nosotros diría motivos diversos imagino, entre otras cosas porque todos somos distintos, si nos
leéis normalmente sabréis que siempre digo que los años pasan, pero la historia siempre se repite, y todas estas preguntas ya hubo quien se las hizo, el tiempo de apostasía ya existía en tiempo de Jeremías, y en Óseas dice que el pueblo de Dios pereció por falta de conocimiento, ¿os dais cuenta que esto va ocurrir hoy en la Iglesia del Señor? Los creyentes están endureciendo sus corazones, están anteponiendo otros intereses a la voluntad de Dios, pero no lo tomemos como un mensaje de tirón de orejas, o de desanimo, sino vamos a tomarlo en: manos a la obra, sabemos la verdad, conocemos la verdad, vamos a seguir sin prisa pero si pausa, el llegar a la meta, no nos estanquemos, cuando nos estancamos es por desilusión, es decir nos hemos apartado de la oración entre otras cosas, o porque entendemos que lo que esta ocurriendo entre los cristianos es de lo mas normal
Juan nos dice que si guardamos sus mandamientos le conocemos ¿guardamos sus mandamientos? Es decir estamos en la disposición constante y diaria a la obediencia, a que esta crezca a medida que vamos creciendo espiritualmente, el fortalecernos en esa obediencia, es fortalecernos en sus mandamientos y por tanto guardamos su Palabra, y todo ello nos lleva a seguir luchando en el día a día para ser cada vez mas semejantes a Cristo, ¿se entiende verdad? Por ello Juan también nos dice que todo aquel que practica el pecado no le ha visto ni le ha conocido…..y si lo enlazamos con lo que decía Óseas, entenderemos sus palabras si entendemos que sin obediencia no hay conocimiento del Padre, cuando nos obstinamos tanto en nuestras circunstancias o hacemos dioses de charlatanes del tres al cuarto, estamos desobedeciendo, por tanto no conocemos realmente a Dios, y por tanto cuesta entender que es el amor, y sin entenderlo es imposible saber amar, si es que una cosa lleva a otra. Y no es un capricho particular este tema, pero si no se predica lo que se debe, y cuando si se predica la sana doctrina no se quiere escuchar lo más normal es que hay desobediencia, ¿Qué esta pasando herman@s? La Palabra dice que perdonemos, entonces ¿Por qué hay tantos resentidos? Si se hablase mas sobre el adulterio, la fortificación, no nos pondríamos las manos en la cabeza cuando viéramos lo que vemos y no allá a fuera en el mundo, no mis herman@s en muchas congregaciones, la desobediencia ha sido la asignatura pendiente de tantos hombres y mujeres de Dios, Sara no pudo esperar al hijo de la promesa y ofreció a la esclava Agar, Sansón sabía que no podía tocar mujer pagana, pero por no guardar los mandamientos del Padre todos conocemos lo que sucedió.
Herman@s la desobediencia nos lleva a la destrucción, si así de clarito os lo digo ¿estamos obedeciendo a Dios para vida o desobedeciéndole para muerte?, ¿cuando vamos a acallar nuestros pensamientos y nuestra palabrería para escuchar la voz del Señor? Que no sea demasiado tarde herman@s y Dios tenga misericordia. Nuestro mundo se deteriora cada vez más. La ausencia de amor en el corazón del hombre cada día produce más tragedias. Las manifestaciones en contra del hombre o de la mujer aumentan cada día. Acoso laboral, acoso sexual, matoneo son algunos ejemplos de los diferentes nombres que se le colocan a los distintos actos de violencia y maltrato. El mundo esta saturado de violencia y odios. Gente inocente muere por el morbo de unos cuantos y la espiral de violencia sube todos los días. En un contexto de odio y venganza, el Señor manda a su Iglesia a amar. Que difícil es amar cuando estamos rodeados de odio podríamos decir. Ese es el desafío!. El Señor nunca nos dijo que era fácil! ¿Conocemos a Dios?, la evidencia es el amor. Herman@s tenemos defectos, no somos perfectos, sin embargo no lo podemos usar como excusa para no reconocer que Dios nos esta hablando. Somos expertos en aplicarles la palabra a los demás, mas si no amamos no conocemos a Dios. Ahora, en la Iglesia se experimenta otro tipo de violencia y es tan grave como las demás. El odio, la murmuración, el chisme, la hipocresía, la discriminación, el amor fingido. ¿Cuántos de los que estamos aquí hablamos del hermano a sus espaldas?, ¿Murmuramos?, ¿Damos a conocer las intimidades ajenas?, ¿Usamos la hipocresía?, ¿Discriminamos en el corazón?, ¿Fingimos amar?. El no conocer a Dios es estar en oscuridad y esa oscuridad no nos deja ver y al no ver formamos una muralla alrededor de nuestro corazón. La oscuridad es ausencia de luz. Si hay oscuridad es por que no hay conocimiento. Es posible que en nuestra vida hayamos escuchado cientos, miles de mensajes de la palabra de Dios, leído libros, asistido a congresos y seminarios y nuestro presente sea de oscuridad total. Es hora de que la oscuridad se vaya desvaneciendo y brille en nosotros la luz de Cristo, el verdadero conocimiento que nos lleve a crecer y a cumplir el propósito de Dios con nuestras vidas.
Vuestra hermana en Cristo Maika
DIOS OS BENDIGA EN EL PODEROSO NOMBRE DEL SEÑOR. ATT. DEVOCIONALES CRISTIANOS MANÁ.
http://www.devocionalescristianosmana.org.es/