Hch 9:6 El,
temblando y temeroso, dijo: Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le
dijo: Levántate y entra en la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer.
De este versículo podemos sacar
muchas enseñanzas, entre ellas, como el Señor es capaz de que doblemos las
rodillas y nos rindamos a El, otra, el reconocimiento de quien es EL que te llama,
otra sería la obediencia, acción y reacción y hoy lo tome para explicarte lo
que ahora voy a escribir.
Saulo era un hombre conocido y
reconocido en su época,
un judío fiel, como cualquiera otra persona en la
actualidad, protagonista, si podríamos decir que antes de conocer al Señor,
cuando lo perseguía era protagonista a su manera en su modelo de sociedad,
espero saber explicarme, todos de una forma u otra hemos sido protagonistas de
nuestras vidas anteriores, antes de nacer de nuevo en Cristo, entre otras cosas
porque en la sociedad que vivimos se nos incita a ser los mejores, a destacar
en algo, mas llega el momento en que Dios te llama y bien sabes escuchar su
llamado de una forma suave, bonita y otras lleva tanto tiempo llamándonos y no oímos
entonces nos tira del caballo, y cambiamos nuestro nombre, dejamos de ser
Saulos para pasar a ser Pablos, bien esa es la teoría, y ciertamente debería
ser así, cuando el Señor nos ha tirado al suelo, nada mas hermoso que reconocer
quien nos llama y preguntarle: ¿qué quieres que yo haga?, con ese acto dejamos
de ser protagonistas de una vida de pecado y sombras, para pasar a ser siervos,
amigos , discípulos del Señor. Alguien podrá decir que Pablo fue protagonista
durante su ministerio, yo le diría que no fue protagonista, sino un hombre que
tomo el papel que el Señor le dio, que dejo que Dios hiciese el propósito que
tenía para él, pero no protagonista, y así es el testimonio que leemos en las
Escrituras, y así debería ser nuestro caminar, nuestra vida de creyente,
quedarnos en un segundo plano, para que primero se vea la grandeza del Señor.
El problema herman@s viene cuando un creyente quiere tomar el rol de protagonista,
porque un verdadero creyente nunca será protagonista de nada, cuando se intenta
serlo es que algo va mal, es cuando se busca la aprobación del hombre y no la
de Dios, es cuando se busca el aplauso fácil, en lugar de hacerse a un lado y
dejar que la gloria sea para el Señor, cuando empieza a montarse un circo
alrededor de lo que es la verdad y la gente acude, no porque puedan aprender o
quieran oír Palabra de Dios, sino palabra del protagonista de turno, gritando
los focos a mi.
Si en algún momento empiezas a
sentir que quieren hacerte protagonista de algo, retírate y ora, ora al Señor
para que te de discernimiento, para que no te deje caer en la tentación de ser
protagonista. Herman@s de este versículo podemos ver como muere un hombre
llamado Saulo, para ver como un hombre deslumbrado por la presencia del Señor, dispuesto
a hacer todo aquello que su Maestro le diga, un hombre que abandono la
comodidad de su puesto de protagonista, para vivir entre toda clases de
personas, pasar largos tiempos preso a causa de bendecir con su boca al
Redentor. Se que me habéis entendido así que poco mas os voy a escribir, ya que
lo que mas nos queda ahora es reflexionar, pero si me vas a permitir que te
escriba solo estas últimas palabras: ¿quieres ser protagonista? Si tu
respuesta es si, entonces tienes un problema, porque vivir en y para el Señor es
dejar de ser protagonista para darle el
primer lugar al Rey de Reyes……
Vuestra hermana en Cristo Maika.
DIOS OS BENDIGA EN EL PODEROSO NOMBRE DEL SEÑOR. ATT. DEVOCIONALES CRISTIANOS MANÁ.
http://www. devocionalescristianosmana. org.es/
DIOS OS BENDIGA EN EL PODEROSO NOMBRE DEL SEÑOR. ATT. DEVOCIONALES CRISTIANOS MANÁ.
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