¿DONDE ESTAS?

Sal 22:2 Dios mío, día y noche te llamo, y no respondes; ¡no hay descanso para mí!

El salmista estaba al borde de la desesperación, se sentía abandonado por el Padre y así lo grito así lo expreso, pudo ser rey, lidiar con ejércitos, pero no era mas que un hombre, que después de desahogarse ante Dios, sabía alabarlo y darle el primer lugar.
Y así es herman@s somos humanos y tenemos momentos en que nos sentimos tan cansados , tan derrotados, que también gritamos al cielo y nos enfadamos, pero la cosa es que luego de eso sepamos volver al Señor, bendecidle y alabarle , lo peor es
quedarnos solo en la lamentación, ahí herman@ es donde realmente llega la decadencia, llega la desolación total, porque aunque sepas que el enemigo aprovecha eso para intentar apartarte del Señor, tu clamor será cada vez mas fuerte, y tu desesperación no tendrá fin, ya que se nos puede hacer creer que El nos ha abandonado. ¿Podrás decir, entonces porque permite todo esto Dios? ¿Por qué permite que me desespere de esa forma? No lo se, realmente no puedo darte una respuesta, lo lamento, pero quiero pensar que me ama tanto, que permite llevarme hasta el extremo, para acabar alabándole como hacia David, recuerda lo que dicen las Escrituras 1Cor 10: 13 No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea común a los hombres; y fiel es Dios, que no permitirá que vosotros seáis tentados más allá de lo que podéis soportar, sino que con la tentación proveerá también la vía de escape, a fin de que podáis resistirla
Ese versículo es el que me conforta cuando ya llego al extremo, cuando mi mente humana no llega a entender el porque, y como siempre os digo nos olvidamos de decir ¿para que? Pero cuando estamos cegados en que el Padre nos ha dado la espalda siempre preguntamos ¿Por qué?, y El lo sabe, pero mira mi herman@ también sabe que vas a reaccionar así, y espera pacientemente a que cuando tu desesperación te deje ver la luz, te deje ver la Cruz, volverás humillado y avergonzado. Se que de nada quizás pueda servirte hoy estas palabras si estas en esta situación, o tal vez así lo quiera el Señor sean las que necesitabas escuchar, sea cual sea la opción tan solo puedo decirte, que yo también me he sentido abandonada, que también he clamado de día y de noche y he tenido la sensación de que nadie me escuchaba, pero gracias al Señor, bendito sea, después de muchas lágrimas he visto la gloria de Dios, después de la lamentación.
Tan solo recuerda esto hoy y siempre, nada escapa a la mirada de tu Padre, y nuestro dolor también es el suyo, pero no te alejes de El, sigue confiando que vendrá la bendición, que aquello que sientes perder vendrá multiplicado, porque así es El, nos ama siendo tan necios e imperfectos como somos, nos ama tanto que entrego a su Hijo a la Cruz, esa Cruz que debe ser nuestro caminar, nuestro gozo y en la que depositamos nuestra fe……..
Vuestra hermana en Cristo Maika.
DIOS OS BENDIGA EN EL PODEROSO NOMBRE DEL SEÑOR. ATT. DEVOCIONALES CRISTIANOS MANÁ.
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