AHÍ ESTÁ

Lucas. 19:10 Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido.

Quién no ha oído nunca la típica frase ¿Y donde esta tu Dios? o similares, como por ejemplo;¿Cómo puede tu Dios permitir que esto suceda?.
Estos últimos días y por los actos de religiosa violencia que han sucedido vuelven a ser dos de las frases más utilizadas para intentar ridiculizar a los cristianos, para intentar hacernos ver que estamos errados aunque en el fondo se nos trate de “herrados” por nuestra fe.
La respuesta es clara, nosotros lo sabemos,
el resto del mundo intenta apartarse de esta respuesta, no le interesa, están bien como están, o eso creen, viven la vida a su manera, sin, según ellos, el estar encadenados a un libro escrito por un, siempre según ellos, ser imaginario, que solo existe en nuestras mentes por que nos han lavado el cerebro.
No señor, no me lavaron el cerebro; pero si el corazón y usó a hijos suyos para arrancar la venda de mis ojos, la que me impedía ver con claridad donde se encuentra Su mano tendida.
Si no existiese nuestro Padre no podríamos responder, pero podemos, pues El fue, es y será, es tan real como que ahora estoy escribiendo.
¿Qué El permite todo esto?....Si, pues tiene el control total de todo, y aún así se preocupa de nosotros de su hermosa y más perfecta creación, no nos tiene olvidados, es más, incluso nos dio el uso y disfrute de todo lo por El creado, y además nos dio la libertad de obrar y pensar, pero igual que como niños; se nos dio la mano y nos cogimos el brazo entero, ahí el hombre natural lo estropeó todo, y todavía hoy pagamos las consecuencias.
Si, esta es la respuesta, El lo permite, todo lo permite, como también nos permite seguir el único camino que muchos ni siquiera quieren oír hablar, permite las tribulaciones, las enfermedades, las calamidades pero sigue esperando que muchos vean la luz que guía a vida eterna libre de todo mal, sigue tendiendo Su mano a todos, todos tienen la libertad de asirla fuertemente y no soltarla más, no obliga, deja decidir si hacerlo o no.
Nuestro Señor tiene eternamente Su mano tendida hacia Su creación, tan solo nos sigue dando libertad para cogerla o no……¿hasta cuando? Solo El sabe.
Debemos dejarnos usar, enterrar los miedos, las vergüenzas, y mostrar a los ciegos como sacarse la venda de sus ojos para que vean la luz, para que encuentren la mano antes de que se cierre y no se deje coger, toda Gloria a El, pues nos guiará El mismo hacia donde debamos ayudar a arrancar estas opacas vendas para que vean que la mano está en Nuestro Señor, en la obra redentora de la cruz manchada con Su preciosa sangre para ser nosotros salvos del eterno sufrimiento; Maranatha.

Vuestro hermano en Cristo Soldado de Dios.
DIOS OS BENDIGA EN EL PODEROSO NOMBRE DEL SEÑOR. ATT. DEVOCIONALES CRISTIANOS MANÁ.
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