Mt 5:15
Ni se enciende
una luz y se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, y alumbra a
todos los que están en casa.
Cuando leo e
intento buscar algún versículo para los devocionales, todos me parecen
necesarios, y tal vez hemos repetido alguno, seguro que si, pero imagino que le
hemos sacado enseñanza diferente, ya que la Palabra tiene esto, que aunque la
Escritura dice lo que dice y no varía, si varía la enseñanza que sacamos, ya
que cuando releemos una porción, nuestra situación es distinta a la que
teníamos cuando lo hicimos las veces anteriores.
Herman@s, este
es
uno de esos versículos que nunca mejor dicho hoy me alumbraron a mi, vino a
mi mente y bueno ahí voy. Cuando vamos a un sitio por primera vez, o nos
mudamos de casa, encendemos todas las luces ya que no conocemos bien la casa,
las habitaciones y es muy probable que si andamos a oscuras por ellas
tropecemos y nos caigamos, ya cuando pasa el tiempo y creemos conocer nuestra
casa al dedillo ya para trasladarnos de una habitación a otra lo hacemos con la
luz apagada, no vale la pena prenderla si conocemos cada peldaño de ella.
Lo mismo nos
ocurre con nuestra vida cristiana amad@s, cuando llegamos a Cristo, nos
sentimos tan agradecidos, tan gozosos que todo a nuestro alrededor brilla, la
luz de la verdad, la luz del Señor nos alumbra, empezamos a saborear esas
primeras bendiciones a las que muchos hemos llamado esos pequeños milagritos, y
queremos explicarles a todos lo hermoso y lo que sentimos al haber aceptado al
Señor. Cuando nos mudamos queremos enseñar a todos nuestro nuevo hogar ¿lo piíllas?
Pasa el tiempo y con el empieza a llegar las pruebas, las tormentas, los
desiertos, y a lo primero luchamos y contamos con el Señor para superarlas,
alzamos nuestra luz para que podamos ver aquello que viene, mas llega mas tarde
o temprano ese tiempo en que por el motivo que sea empezamos a enfriarnos,
nuestras circunstancias hacen que empecemos a contar mas con nuestras fuerzas
que con las de Dios, y ahí nos cuesta mas intentar afrontar lo que viene ya que
poco a poco hemos ido apagando las luces que nos alumbraban, poco a poco hemos
ido dejando al Señor a un lado, hasta que llega el momento que esa luz esta
bajo una mesa, una cama y ya no nos alumbra, y los demás ya no ven en nosotros
esa luz que nos hacia:”no se que tienes pero te ves bien” y es porque hemos
dejado al Señor aún lado, no digo que hayamos perdido la fe, digo que quizás no
oramos de la misma forma o como deberíamos orar, que seguimos confiando pero
hemos tirado la toalla y esperamos que algo ocurra mientras nos consumimos como
esa luz, poco a poco.
Herman@s, hoy es
día para volver a poner la luz sobre la mesa, en el puesto mas alto, para que
otros puedan ver y nosotros podamos ser guiados por el Señor, es el momento de
dejar que Dios haga aquello que tiene preparado para nosotros, pero que no
puede hacer si andamos en penumbra, hoy es el momento de revestirse con la
armadura de Dios, dejar que el Espíritu nos vuelva a guiar, es el momento de
decir tengo esperanza, fe y amor, amo al Señor y
quiero que siga alumbrando mi vida………..
DIOS OS BENDIGA EN EL PODEROSO NOMBRE DEL SEÑOR. ATT. DEVOCIONALES CRISTIANOS MANÁ.
http://www.
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