LA PALABRA

Jn 8:32 y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres.

He leído tantas veces este versículo, y lo he interpretado siempre de la misma forma hasta hoy, y de verdad os digo que me quede algo sorprendida, ¿sabéis la responsabilidad que conlleva conocer la verdad?

Dicen que la verdad

no puede ofender, pienso que según se use, cuando usas la verdad con responsabilidad, y amor, puede quizás hacer daño al momento pero con el tiempo sanara, pero cuando se usa para desvirtuar una realidad o usarla para dañar entonces esa verdad se convierte en el peor de los venenos.

Todos sabemos que las drogas son malas, pero cuantos de nosotros padecemos algunas enfermedades y tomamos bastantes medicamentos, y en ellos, en su composición encontramos sustancias que son drogas, que quiero decir con ello, que según usemos la verdad, quien la escuche la tomara de una forma u otra, cuando se usa con la dirección del Espíritu esa palabra dará libertad, sanación a aquel que la escucha, mas cuando es usada por aquellos que intentan prostituirla, que la usan para sus propios intereses puede causar tales daños que muchos de ellos son irreversibles, por culpa de verdades mal administradas, hay herman@s que se han apartado de Dios, otros no alaban y adoran al Dios verdadero aun creyendo que lo hacen sino al titiritero de turno.

Tanto el que predica, como el que escribe, como todo creyente tiene que tener una dirección y una sabiduría que solo puede venir de Dios, y debe ser usada con reverencia, y mucho cuidado, porque otros la escucharan, leerán, o simplemente cuando vayamos a comprar a una reunión en la escuela, es decir cuando los demás vean nuestro testimonio procesaran sus mentes lo que hemos dicho.

Es por ello herman@ que te digo que contar la verdad conlleva una gran responsabilidad, pidamos pues siempre que Dios, que el Señor ponga en nuestros labios, en nuestras manos la verdad ya que las palabras si vienen solo del hombre provocan disputas, malos entendidos, si provienen del diablo, miedo, dolor, aniquilación, mas herman@ cuando la verdad proviene de la fuente, proviene del Espíritu de Dios, es luz, es sanidad, es paz, es gozo, es saciar nuestra sed, nuestra alma.

No tomemos pues la Palabra de Dios a la ligera porque todos, si todos herman@s , todos somos administradores de la Palabra……..

DIOS OS BENDIGA EN EL PODEROSO NOMBRE DEL SEÑOR. ATT. DEVOCIONALES CRISTIANOS MANÁ.
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