TERCOS COMO CACHORROS

Rom 14:8 Pues si vivimos, para el Señor vivimos, y si morimos, para el Señor morimos; por tanto, ya sea que vivamos o que muramos, del Señor somos.

Sabéis hay algo que me preocupa seriamente que pueda llegar a ocurrirme, que llegado el día, no me reconozca mi Señor y mi nombre no este en el libro de la vida, pero seamos claros herman@s por mucho que nos empeñemos no conseguimos una obediencia total, la lucha contra la carne, contra el pecado nos gana muchas veces la batalla.
Mirad, esto es como los cachorros,
en nuestro caso tenemos dos, os explico un poco su proceder para que veáis que en realidad no somos tan distintos. Primeramente son tercos, si, siempre quieren hacer aquello que quieren, no les importa las consecuencias, visualizan algo y se tiran a por ello, y por mucho que les llames o les corrijas en un primer momento parece que obedecen en otros directamente no lo hacen y a la final acabas intentando corregir su actitud, bien hay que decir que no son malos, solo desobedientes, no quieren hacer en este caso nuestra voluntad, sino la suya, pero bien , también se portan bien , lo intentan, por lo menos y ahí es donde tienen su recompensa.
¿Qué quieres que te cuente mas? Evidentemente no te estoy comparando a un perro, pero fíjate que su actitud no cambia mucho de la nuestra, por mucho que sabemos que es Dios quien manda, quien marca los tiempos, nos empeñamos en hacer nuestra voluntad, El nos llama de muchas formas para que dejemos de correr como sino hubiese un final, y cuando nos damos cuenta es cuando paramos y dejamos a veces disciplinarnos y otras muchas no, y por supuesto no siempre estamos rebeldes, también somos capaces de obedecer y ahí es donde el Padre se glorifica y se siente bien porque hemos sido obedientes.
En el caso de los animales, muchos son abandonados cuando llegando a una edad adulta y no han aprendido las normas de adiestramiento correctas para poder convivir en la familia, ¿os imagináis que Dios hiciese eso con nosotros? Que cuando El creyera que ya debemos tener una madurez espiritual y seguimos sin hacer caso, se harta de nosotros y nos abandona, porque crea que no podamos convivir en esa gran familia que tenemos en Cristo, quizás te puede parecer algo como para reírte, pero te aseguro que no lo es, la Palabra es clara, entraran aquellos que hacen la voluntad del Padre, así que no tiremos de la cuerda, vaya que se rompa y no exista marcha atrás, y nos quedemos tirados en una cuneta a la merced de cualquier vándalo, seamos fieles a aquel que nos instruye para que nuestra vida sea ejemplo para muchos, que se sienta orgulloso de nosotros aunque en ocasiones seamos tercos, venga herman@s ¿Quién es el hombre para que Dios se acuerde de El? Si somos claros nada, porque hasta los perros son mas fieles que nosotros, que aun maltratándolos darían la vida por ti si lo necesitaras, no tenemos un Dios que nos maltrate, así que no seamos necios y si vivimos, vimos para El y si morimos, morimos para El y que Dios tenga misericordia de todos nosotros………………….
DIOS OS BENDIGA EN EL PODEROSO NOMBRE DEL SEÑOR. ATT. DEVOCIONALES CRISTIANOS MANÁ.
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