Jn 14:6 Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí
Son tantas las ocasiones en las que te dicen es necesario congregarse, es necesario que compartas con otros hermanos, y de más...... y si es cierto todo ello es bueno, pero que bueno es también tener ese momento en que uno queda solo ante el Señor y ya no me refiero a esa oración en privado que mantenemos a diario, sino a ese momento especial,
ese momento que yo lo compararía con una cena romántica con tu pareja, que se queda en un lugar especial solo para los dos, ese que luego recuerdas diciendo: ahhhh recuerdas cuando íbamos a este u otro sitio nuestro, y único a eso me estoy refiriendo , ese lugar que sólo conoces tu y tu Señor, donde te sientas o te arrodillas, donde primero le dices lo mucho que le amas, donde casi puedes acariciarlo pero el pudor te lo impide, y a medida que va pasando la conversación vas desnudando tu alma para entregarle todo lo que hay en tu corazón, y lo que ahí pasa solo queda entre los dos.
Herman@s que bueno poder encontrar un lugar así, donde la comunión con Dios es total y cercana, donde el respeto y la admiración se conjugan en un amor incondicional y donde cuando el alma no llega el Espíritu alza tu voz hasta tu Padre, ese momento donde lloras de emoción, de gratitud, ese momento en que aunque hubieran cientos de personas a tu alrededor, nada importa porque a nadie ves, solo entre los dos.
Si no lo encontraste aún búscalo, busca donde decirle que le amas, busca donde decirle que sin Él nada eres, busca donde puedas mostrarte ante tu Rey en audiencia privada.
Algunos pensaran, yo vivo en una gran ciudad y no puedo, no hay lugar, otros que no tienen tiempo, pero seguro que cuando andaban de romance, encontraban ese lugar y ese tiempo para ver a su novio o novia, pues enamórate del Novio, y encontraras ese lugar solo para los dos, porque el Novio también te esta esperando a ti.
Yo no voy a decirte la frecuencia de los encuentros, Dios me libre a mi de ello, pero si deberíamos sentir esa necesidad, porque si no te enamoraste de Él, algo anda mal en tu caminar, entonces herman@ busquemos en oración donde esta el quid de la cuestión y atajémoslo, porque es imposible llegar al Padre sino es por el Hijo.
Enamórate del sacrificio, enamórate de la obra redentora, enamórate de la sangre de Cristo, enamórate de la Cruz, porque todo ello, es el Señor y veras como no es tan difícil encontrar un lugar solo entre los dos.........
Que el Señor os guarde.
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