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sábado, 28 de febrero de 2015
Col 3: 24 sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís.
Col 3: 24 sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís.
Hay un dicho que dice que volver atrás ni para coger impulso, pero en ocasiones va bien mirar atrás para recordar momentos y hoy me vino a la cabeza cuando acepte al Señor. Jajajaja los que me conocen y recuerden esos tiempos se que dirán: “Señor que torbellino de mujer” era
preguntona, todo lo quería saber, y cuando me asomaba una duda necesitaba que alguien me dijese, me explicase, era como una bomba de relojería, pero lo que recuerdo con mucho agrado fue lo que ocurrió la mañana siguiente de quebrarme ante el Señor, me levante temprano y me fui a la congregación que por aquellos tiempos me congregaba, tuve que esperarme porque el Pastor no había llegado, con un frió en la calle que ni os lo imagináis, y cuando el Pastor me vio, me saludo y me dijo: en que puedo ayudarte a lo que yo respondí, no , no necesito que me ayude a nada he venido para que me diga: ¿y ahora que hay que hacer? Es decir toda mi ansia, mi anhelo era querer hacer, servir en la congregación, si había que limpiar, pues ya me parecía bien, si tenia que estar en la biblioteca pues también, que había que salir a evangelizar pues ahí vamos, herman@s cualquier cosa me parecía bien, lo hacia con agrado y me sentía mal, porque pensaba, algunos te agradecen lo que haces, otro no, pero no me importaba porque yo me sentía gozosa, era una sensación maravillosa, ohhh Señor bien sabes tu como fueron esos comienzos.
Os mentiría si dijese que no me importaba que otros no hicieran nada, porque si que en ocasiones yo pensaba: ¿pero Señor no hay nadie mas dispuesto a trabajar? No hay otra tonta que quiera hacer esto y lo otro, pero cuando tenia ese sentimiento perdía mi paz, mi gozo, el mismo que conseguía haciendo, y poco a poco dejo de importarme si los demás hacían o no, hasta el día de hoy, porque llegue a entender que me gozaba porque todo lo que hacia y hago es para el Señor, no para el hombre, si que hacemos y el provecho lo saca el hombre, pero hacerlo como si lo hicieses para el Señor, herman@ hay que vivirlo porque es un chute de animo y de gozo que nadie te puede quitar.
Herman@ si hoy te sientes sol@ sirviendo no te hagas mala sangre, sigue haciéndolo y hazlo para el Señor, y con amor, sin esperar nada mas que ese gozo que tanto os hablo, porque cuando quieras darte cuenta Dios te estará recompensando, y es que cuando hacemos algo para el Señor, para el Hijo de Dios, el Padre no se olvida de ello, y a su tiempo cosecharas lo que sembraste.
No dejes que nadie te haga sentir que te manipularon o se han aprovechado de ti, al contrario ya que ese trabajo hecho con amor ha sido un gran pago para el corazón, y es mas no importa que nadie vea tu trabajo o sepa lo que haces para la obra del Señor, porque todas ellas serán bendiciones para tu vida.
Herman@s no nos vamos a dar por vencidos, vamos a seguir trabajando, porque sabemos y tenemos claro para quien lo hacemos, no cae en un pozo sin fondo, Dios vera tu corazón, tu intención y lo tendrá en cuenta……
Alégrate por sentirte bien cuando trabajas para el Rey……
DIOS OS BENDIGA EN EL PODEROSO NOMBRE DEL SEÑOR. ATT. DEVOCIONALES CRISTIANOS MANÁ.
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